Bora Bora
Bora Bora es uno de esos destinos exóticos que aún se puede visitar con la sensación de estar en otro mundo, un paraíso natural en la recóndita Polinesia Francesa.
Sus mayores atractivos son sus playas, esas aguas cristalinas salpicadas de arrecifes de coral, la observación de la vida submarina y los bungalows sobre el agua.
Es una isla de la Polinesia Francesa ubicada el norte de Thaití, a 260 kilómetros de la capital de Papeete. Para llegar a ella desde cualquier punto del mundo es necesario pasar primero por Thaití. Esta isla es pequeña, poco más de 30 kilómetros cuadrados de territorio, y la gran laguna interior que la comunica con el mar también está bordeada por el arrecife de coral.
La mejor temporada para viajar allí es durante los meses de mayo a octubre, ya que el clima es fresco y menos húmedo que en los otros meses, aunque son probables las lluvias combinadas con el sol. El resto del año son habituales las tormentas huracanadas. En julio podremos celebrar junto a los habitantes de la isla la fiesta del “Heiva”. En cualquier hotel y rincón de la isla se realizan celebraciones y actos culturales diversos, destacando las espectaculares danzas tradicionales.
La isla está rodeada de “motus”, pequeños islotes alargados que suelen tener cierta anchura y vegetación. Uno de los motus más bellos y fotografiados de la Polinesia es el Motu Tapu.
Abundan los hoteles de lujo, con bungalows de estilo polinesio edificados sobre las aguas de la laguna de Bora Bora. También se pueden encontrar pensiones más asequibles en entornos menos idílicos.
Dentro de la laguna, que podremos recorrer en canoa, en barcos con fondo de cristal, a nado o buceando, hay varios islotes. También se puede hacer una excursión hacia la barrera de coral para hacer submarinismo y contemplar la rica y colorida vida marina. También podemos disfrutar de las puestas de sol desde un katamarán. En el parque marino Lagoonarium, situado en un islote privado, se puede ver y nadar con diferentes animales, como tortugas, rayas, delfines, peces de colores…
Si de gastronomía hablamos, Bora Bora cuenta con una deliciosa tradición culinaria que nos sorprende con mermeladas hechas en base a frutas exóticas, cocina marinera a base de mariscos y pescados. Encontraremos una mezcla de platos franceses e internacionales y las especialidades tahitianas.
Hay alternativas para comer fuera de los hoteles. Los restaurantes más conocidos están en Bahía Pofai: Bloody Mary’s, Villa Mahana, Kaina Hut… En Vaitape y Matira encontraremos snacks y opciones más económicas.
Espero que con este “paseo” por Bora Bora en la Polinesia Francesa os haya abierto el apetito viajero, y pronto volveremos con nuevos viajes exóticos para que tengáis donde elegir un destino diferente.
Dios que paraiso ! Sin duda alguna tendré que viajar
ResponderEliminarQuerida amiga, imagina tú y yo en esas playas... ¡Lo estoy deseando! 💘
ResponderEliminarUn beso Mar
Muy pronto se harán realidad nuestros sueños!!
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